Reparar el cabello después del verano: cómo devolverle su salud y brillo natural
- lookpeluqueriamark
- 23 oct
- 2 Min. de lectura

El verano es sinónimo de sol, playa, piscina y diversión, pero también puede convertirse en el peor enemigo del cabello. Las altas temperaturas, la radiación solar, el cloro, la sal del mar y la humedad afectan directamente a la fibra capilar, provocando que pierda hidratación, se vuelva más quebradiza, sin brillo y con tendencia al encrespamiento.
Si al mirarte al espejo notas tu melena más apagada, con las puntas abiertas o con más frizz de lo habitual, no te preocupes: con los cuidados adecuados puedes repararla por completo y devolverle su aspecto sano, fuerte y radiante. Aquí te contamos cómo lograrlo paso a paso 👇
🧼 1. Limpieza profunda: el primer paso para empezar de cero
Después del verano, tu cabello necesita una especie de “detox”. La acumulación de residuos de cloro, sal, arena, protectores solares y minerales del agua se adhiere a la fibra capilar, debilitándola y volviéndola opaca.
La clave está en realizar una limpieza profunda con un champú que elimine esas impurezas sin resecar. Este paso prepara el cabello para absorber mejor los tratamientos que aplicaremos después.
En Look Peluquería, recomendamos además acompañar esta limpieza con un diagnóstico capilar KScan, una herramienta que analiza el cuero cabelludo y la fibra en profundidad para saber exactamente qué necesita tu melena tras el verano.
2. Hidratación intensiva: devuelve la suavidad y elasticidad
La deshidratación es uno de los principales problemas tras el verano. La exposición solar y el contacto con el cloro y la sal agotan las reservas de agua del cabello, dejándolo áspero y sin movimiento.
La solución pasa por incorporar tratamientos hidratantes profundos tanto en el salón como en casa. En Look Peluquería trabajamos con rituales específicos que penetran en la fibra capilar y restauran su estructura desde el interior, devolviendo suavidad, brillo y fuerza.
En casa, apuesta por productos que contengan ácido hialurónico, aceites nutritivos y ceramidas, y aplica mascarillas hidratantes al menos una vez por semana.
3. Sanear las puntas: imprescindible para evitar roturas
Aunque muchas veces lo evitamos, cortar las puntas es una de las decisiones más inteligentes tras el verano. No hace falta un cambio radical: un corte de mantenimiento elimina las zonas más dañadas y evita que el cabello se rompa o se abra aún más.
Además, este paso prepara la melena para absorber mejor los tratamientos, crecer más fuerte y mantener un aspecto saludable.
4. Reforzar con tratamientos profesionales
Si tu cabello ha sufrido mucho durante el verano, lo ideal es completar tu rutina con un tratamiento profesional en salón. Desde tratamientos reparadores intensivos y rituales antiencrespamiento hasta opciones más avanzadas como la keratina sin formol, que elimina el frizz sin dañar la fibra, hay muchas alternativas para devolverle la vida a tu melena.
Consejo extra: evita el uso excesivo de planchas y secadores durante las primeras semanas tras el verano y protege siempre tu cabello con productos termoactivos. Así ayudarás a que la fibra se recupere con mayor rapidez.



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